Una de las ideas que este blog defiende es que cualquiera con un mínimo de conocimientos de psicoanálisis, y no necesariamente impartidos por alguna institución, puede psicoanalizar, y hasta inclusive puede pasar como un psicoanalista, sin que el fraude sea notado. Aunque nunca haya estudiado algo de psicoanálisis, y lo único que haga sea hablar como un psicoanalista, el engaño lo puede mantener. Todo depende de como se habla. Ahora, cualquiera con un mínimo bagaje de psicoanálisis se siente impulsado y seguro al interpretar psicoanaliticamente lo que se mueva frente a sus ojos, y no sentirá duda al hacerlo. De aquí que muchos con algo de conocimiento del psicoanálisis se dediquen a lanzar, sin titubear, interpretaciones a diestra y siniestra, y hasta recomienden hacer terapia. Bien, anoche puede ver por televisión un ejemplo de todo esto. A este psicoanálisis Freud lo llamaba salvaje. En algunas traducciones aparece como silvestre, pero en este caso creo que le cabe mucho más lo de salvaje. Psicoanálisis muy salvaje ... y encima televisado.