Mitos sobre la histeria

¡Algún día tenía que suceder!

¡Tenía que suceder! Tarde o temprano iba a pasar. ¡Escribí un libro! Pero no es un libro cualquiera. Si quieres descubrir el verdadero valor de la obra freudiana, su “revolucionaria” originalidad y deshacerte de los mitos que la rodean, este libro es el que necesitas. Te brindará una visión clara de eso que los psicoanalistas se vanaglorian de conocer bien (Espóiler: no lo hacen.). Pero también es una oportunidad de mostrar tu apoyo a este blog y a su autor. También es un buen regalo para su terapeuta, ya sea psicoanalista o no. Si lo es, ¡aún mejor! Es una gran oportunidad de poder ver los chispazos cuando haga cortocircuito su cabeza y sacarlo de su ilusión.

Otro ejemplo de deshonestidad feminista

Encontré en la histeria un punto fundamental de la estructura del Psicoanálisis. Cuando se ataca la histeria se golpea en un punto bastante sensible del edificio teórico psicoanalítico. Ahora bien, al hablar de Psicoanálisis, terminamos, tarde o temprano, hablando de sexo y de las mujeres que pasaron por el diván de Freud. Y si hablamos de mujeres y sexo, terminaremos metiéndonos rápidamente en el terreno del feminismo. Así, yo pasé de la histeria a la histeria libidinosa, o sea ninfomanía, y de su mano a toparme con un libro feminista. Y las autoras, en mi experiencia, son deshonestas y la autora de ese libro me dio rápidamente un ejemplo de lo que empiezo a considerar ya como una deshonestidad feminista típica.

Un ejemplo de la mitología freudiana sobre la histeria

Al escribir ¿Qué demonios es histeria? me di cuenta de la cantidad y enormidad de los mitos freudianos, principalmente y obviamente los de la histeria. No es menor esto, ya que la histeria está en la base fundacional del Psicoanálisis y sirve, aún hoy, como una forma de legitimizarlo. Pues me ha llegado un texto que muestra esto. Es un buen ejemplo de la mitología freudiana y como sirve para darle un aire de disciplina necesaria, innovadora y hasta humanitaria. Pero lo más destacable del texto es que ya solo en el primer párrafo uno puede ver la densidad de los mitos. Me refiero a que en un simple párrafo se puede apreciar una muy grande cantidad de estos mitos. Mucho en tan poco espacio.

No es como crees que es

Cuando uno conoce la histeria se termina conociendo el contexto médico e intelectual en el que Freud se movía. Uno puede darse cuenta de la verdadera dimensión de su trabajo y de su lugar con respecto a sus colegas. Era, simplemente, uno más del montón que no aportaba mucho a la cuestión. Incluso sus aportes eran retrocesos a la teoría uterina que dominó el tema de la histeria por unos 20 siglos y que el siglo XIX había superado ampliamente. Además, su uso de la sugestión hacía caer todo su trabajo en la sospecha. Sin embargo, a pesar de no aportar nada nuevo, hoy se siguen manteniendo mitos sobre lo heroico y genial de su trabajo. Vamos a analizar unas pequeñas ideas sobre la relación de Freud con la hipnosis.

Ya casi

Dicen que, aunque no lo veamos, el sol siempre está. Podría decirse lo mismo de mí. Aunque no he estado en este blog hace mucho tiempo, no significa que haya abandonado el tema. Sigo escribiendo, pero no aquí y no en un lugar que se pueda ver ... por ahora. Simplemente, estuve escribiendo un libro. ¡Ya era hora que sucediera! Aunque no es uno directamente relacionado con el tema del blog, o quizás sí.

Feminismo, histeria y la importancia del contexto

Hace más de un año que estoy detrás de la histeria. Intento saber que era. Más específicamente intento saber como se veía una paciente histérica. Quiero saber como es que la identificaban en las épocas de Freud. Hoy ya tengo una imagen muy bien formada, pero sigo buscando y revisando material. Recientemente, me encontré un libro que pienso que debería darle una mirada, pero una hojeada rápida ya me dice que es uno más del montón que replica ideas sin fundamentos y distorsionadas sobre la histeria. Es un libro feminista sobre la histeria. Como unos cuantos que me he topado, deforma la histeria de forma tendenciosa. Solo buscan aquello que confirma el mito que la histeria era una etiqueta para las mujeres que se comportaban de forma para nada patriarcal.

Charcot no lo dijo primero

En eta etapa de investigación histórica, más bien de, por así decirlo, de "arqueología" de ideas me topo con alguna singular. Estoy investigando la histeria en finales del siglo XIX leyendo tratados médicos y literatura afín; y me encuentro con algo bastante llamativo que parece haber pasado desapercibido. Aquí, en general trato de las ideas que se parecen atribuir como originales en Freud pero que en realidad son ideas que ya estaban antes y, a veces, mucho antes, de que siquiera el Psicoanálisis haya nacido incluso que haya nacido el mismo Freud. Pero hoy le toca a Charcot.

Páginas