Ya pasado el parcial sigo con lo recortes más llamativos de lo que me toco estudiar. Hoy les traigo a Françoise Dolto, la experta psicoanalítica en el tratamiento de los niños. Dolto es una referencia casi obligada en los claustros de la Facultad, si de psicoanálisis se trata, claro esta. No he leído mucho de esta autora, pero parece no diferir de cualquier experto en niños dando vuelta por ahí. Todo buen conocedor del mundo de los niños debe exagerar, y Dolto hace honores a esta practica. ¿Para que exagerar? Cuando uno no esta muy seguro de lo que dice, debe exagerarlo, para asustar al que escucha. Se dirá que asusta chicos. No, para asustar a los padres y que le hagan caso, así puede decir que miles de padres le hacen caso. No importa que estos padres, la mayoría primerizos que buscan ayuda y algo del conocimiento de los expertos en niñez, estén tan asustados que le hagan caso al primero que se les cruza en el camino, por algo existen decenas de revistas especializadas que explotan esto. Bien, acá aparece Dolto, la cual casi sin verificar lo que dice se hecha al ruedo a hablar.

Quizás la mayoría concuerde con conmigo, que más allá de lo que se diga, la niñez y especialmente la adolescencia es una etapa difícil para cualquiera. Los "expertos" aprovechan esto y agregan más pánico a los ya asustados padres. Estos recortes que traigo ilustran las exageraciones que hace Dolto. Así, cuando uno ve que la adolescencia y la niñez son etapas donde la personalidad del chico es algo frágil, Dolto prácticamente dirá que es una especie de niño hecho de cristal. Veremos esto en un solo párrafo del texto :

Un bebé cuya familia lamenta que sea como es, que se parezca a aquel otro, que tenga una nariz así o asá, y llega hasta lamentar el sexo que tiene o el color de su cabello, corre el riesgo de quedar marcado para toda la vida, mientras la gente piensa que no comprende nada. 1

Un bebe, al parecer de Dolto, comprende todo lo que se le dice. Que es consciente de todo su entorno. ¡Maravillas del Inconsciente! Notemos que es de un bebé del que se habla. Dos oraciones debajo continua :

El niño tiene en cuenta las cosas, no hace más que oír que hablan mal de él, y se lo toma al pie de la letra. Y se trata de algo que puede comprender. de por vida, sus relaciones con la sociedad. 2

Otra cita mucho más adelante en el texto :

... de once a trece años: tiene rubores, se tapan el rostro con los cabellos, azotan al aire con las manos para vencer su malestar, su vergüenza, o pueden incluso enmascarar una gran herida que quizá sea indeleble. 3

Si la caga con su hijo una vez, la caga para siempre. Intente mantenerse tranquilo con un hijo y escuchando de esto de una experta. Lo reto!. Es cierto que hasta los tres años, el niño al no tener un concepto de la mentira debe tomar todo de forma seria, pero de ahí a trastornarle la vida es un largo trecho4. Notemos que estamos hablando de niño ahora, y ya no de un bebe.

Ahora bien, ¿por que hacerle caso a Dolto? Por que sabe cosas que la gente no. Siguiendo el texto, una lineas luego :

Pero, desgraciadamente, la gente no sabe cual es período sensible para dicho joven. 5

¿Cual es ese periodo? Releamos con atención. Empezamos hablando de un bebe, luego de un niño, y ahora ¿dijo joven? Al final del párrafo :

... el niño recibe a quemarropa una descarga negativa que le afecta profundamente. Pues bien, lo mismo sucede con un joven en pleno desarrollo. 6

Entonces, si bien entendemos este párrafo, el periodo del que habla no es más que desde el nacimiento hasta la juventud. Lo cual es decir nada. ¿cual es el periodo más sensible del infante? Pues su infancia. ¿Y del adolescente? Su adolescencia. En otras palabras todo su desarrollo. En definitiva nada concreto. Dolto no nos da ningun información, pero su posición de "experta" le otorga un plus que nosotros no tenemos. No hay nada más que lo que dirá cualquier madre al respecto a su hijo, pero con un tonito de autoridad pediátrica, y de ahí aprovecha para asustar y sonar con más autoridad.

¿Es tan vulnerable un adolescente? Al parecer si :

Para comprender adecuadamente qué es la inopia, la debilidad adolescencia, tomemos la imagen de los bogavantes y langostas que pierden su concha : se ocultan bajo las rocas en ese momento, mientras segregan su nueva concha para adquirir defensas. Pero, si mientras son vulnerables reciben golpes, quedan heridos para siempre; su caparazón recubrirá las heridas y las cicatrices, pero no las borrará 7

¿Que tan metafórico es todo esto? Al parecer casi literal es el asunto para Dolto, ya que no hay ningún dicho que aminore el pánico creado por esta imagen en las mentes de los padres primerizos o poco seguros.

Estamos hablando de una psicoanalista, por lo tanto el sexo debe aparecer en algún momento en lo que habla, y hará de la sexualidad un punto de gravitación sobre todo lo que enuncie. ¿Como es la sexualidad del joven o pre-adolescente? :

No tienen aún vida sexual, si no es a través de la imaginación. Con mucha frecuencia, penetran en un falso nivel expansivo de la sexualidad, que depende de lo imaginario : la masturbación. En el momento difícil en que los jóvenes se sienten incómodos en la realidad de los adultos por la falta de confianza en si mismo, su vida imaginaria les sostiene. El muchacho o la joven están casi decididos a excitar en sí la zona que les dará la fuerza y valor, es decir, la zona genital que se anuncia. Y de ese modo la masturbación, de remedio de su depresión, se convierta en trampa. 8

Tratemos de entender lo que dice acá. ¿El adolescente, cuando esta deprimido se masturba?. Si fracasa en sus relaciones sociales desembocara en onanismo? ¿Se me esta diciendo que la masturbación no es producto de esta "zona genital que se anuncia", producto de la cascada de hormonas que sufre el adolescente? ¿La masturbación es producto de su vida social confusa, y no de una sexualidad naciente y que es explorara por el mismo adolescente?

Acá cualquiera tendera a obviar la depresión anunciada por Dolto. Se dirá que refiere a un estado parecido a una depresión, un "es como si estuviera deprimido". Una "depresión adolescente", no una depresión tal cual. Yo también diría lo mismo pero, unas lineas antes, Dolto expresa :

Hoy, muchos jóvenes a partir de los once años conocen estados depresivos y estados paranoicos. 9

Entonces el párrafo toma otra dimensión aún mayor. Su sentido no cambia mucho, pero las conclusiones se tornan más extrañas. Se dice que la masturbación es el remedio de esta depresión y que por ello recurren a ella. Según entiendo la depresión es una estado en el que la persona que lo sufre va perdiendo la capacidad de sentir placer en lo que hace, y no me refiero a placer sexual solamente. Poco a poco el depresivo se encuentra que las actividades que se daban como placenteras ya no lo son, y, que luego en el tiempo, esta incapacidad para el disfrute se extiende a otras actividades. Y el depresivo se encuentra que muy pocas actividades le otorgan algo de placer. Decir que la masturbación es un remedio a su depresión, es decir mucho al respecto, quizás demasiado.

Solo me queda echar un poco de tranquilidad en las mentes de los padres Doltianos. No todo es tan blanco o negro con los hijos. No es todo tan extremista como pretende Dolto. Un experto en adolescencia no debería llenar miedo a un padre, ya que lo más probable es que haya ido a ver al experto por el miedo que siente o que no cree llegar a cumplir con la responsabilidad de ser un buen padre. Si un experto asusta de esta forma el padre se sentirá desbordado y querrá seguir al pie de la letra los consejos del experto. La idea de la paternidad es que el padre cuide de su hijo y no que el experto lo haga. La idea es que el psicologo le aporte formas, ideas o maneras de relacionarse con su hijo. Lograr una relación más estrecha. No solo palabras en el consultorio del psicoanalista, ejercicios, practicas o cualquier cosas practica que le sirva para ser mejor padre. No hay mucho que se pueda decir que no sea una visión generalizada del adolescente, para una visión más centrada en el hijo propio uno debería ir a visitar a un psicólogo. Los hay buenos, pero no crea en aquel que lo llena de miedos hasta el nivel que ya no puede pensar. Y recuerde que siempre la ultima palabra la tiene el padre e hijo.

• 1. La causa de los adolescentes Françoise Dolto pag. 13. Las cursivas son mías.
• 2. Ídem pag. 13. Las cursivas son mías.
• 3. Ídem pag. 16. Las cursivas son mías.
• 4. Que levante la mano quien odia su vida o sus padres por la mentira de Santa Claus.
• 5. Ídem pag.13
• 6. Ídem pag. 13. Las cursivas son mías.
• 7. Ídem pag. 13. Las cursivas son mías.
• 8. Ídem pag. 14. Las cursivas son mías.
• 9. Ídem pag.13